Históricamente, el pueblo Galés, ha conservado y cuidado mucho sus tradiciones, costumbres e idioma y esto por supuesto, también se ha mantenido en la cocina Galesa. Hoy en día y gracias a la iniciativa “El verdadero sabor del País de Gales”, se celebran safaris gastronómicos en hoteles, restaurantes y cabañas a lo largo del país.
Esta iniciativa promueve y apoya la utilización de productos de calidad que se encuentran a lo largo y ancho del país, dando a conocer desde recetas tradicionales del interior hasta los pescados más frescos bañados en las salsas más envolventes.
Originariamente, la cocina galesa venia de mano de los trabajadores artesanos como granjeros o mineros que recogían las verduras de sus tierras, pescados de los ríos cercanos y carne del ganado de la familia.
A lo largo del país hay innumerables safaris organizados y establecimientos con el logo de esta iniciativa donde encontrar una magnífica selección de comida y bebida galesa combinada con actividades culturales y visitas gastronómicas. Es tal la riqueza gastronómica del país, que resulta casi imposible destacar solo un par de los safaris ofrecidos.
Entre esta amplia oferta de posibilidades, puedes fundirte entre quesos y vinos en la zona norte de Gales, en Snowdonia, donde estos dos productos se elaboran con el sabor de esta región que ofrece parajes y valles impresionantes entre los que descubrirás; bodegas donde elaboran los vinos, zumos de manzana o sidras de la zona y granjas donde degustar quesos de cabra hecho por artesanos con la leche de su propio rebaño. También podrás encontrar safaris organizados en los que degustar exquisitos productos de temporada como verduras, frutas y setas que tú mismo recogerás y catarás.
Tampoco podemos dejar de mencionar los safaris del vino, en los que descubrir el proceso de elaboración, combinación y resultado de la recogida de manzanas, uvas y bayas obteniendo el delicioso triple galés.
Y por último, mencionaremos un safari a través del tiempo con el que volver al siglo pasado y conocer como se trabajaba en las granjas antes del desarrollo industrial llegando a ser totalmente autosuficientes obteniendo su propia leche, quesos, vegetales y carnes. Y como no, la visita no finaliza hasta que no se deguste todo lo mostrado.
