Más de cincuenta de actividades impulsadas por la Ruta del Vi DO Empordà que combinan diferentes propuestas como una marcha popular a pie entre los viñedos de Capmany, catas en espacios singulares como el Castell de Requesens y el Monestir de Sant Pere de Rodes y nuevos paquetes para disfrutar de diferentes experiencias.
La edición de este año ha reducido el número de actividades respecto a años anteriores con la intención de ofrecer una propuesta más cualitativa que cuantitativa que convierta el evento en un escaparate de la variada y completa oferta enoturística de la Costa Brava.
Las actividades se han agrupado por zonas y semanas para concentrarlas cronológica y geográficamente con el objetivo de facilitar el acceso de los visitantes y promover la realización de más de una experiencia. Después de la inauguración, el primer fin de semana de abril, las actividades se distribuirán por semanas en estas zonas: la plana de l’Empordà, l’Albera, el Baix Empordà i el Cap de Creus.
El Vívid 2017 empezará el 1 de abril, por la mañana, con la primera edición de una marcha popular con cata de vinos por los viñedos de Capmany. Los participantes harán un recorrido de cinco quilómetros a pie entre viñedos y bodegas del municipio y acabarán la actividad degustando vinos DO Empordà y haciendo un desayuno popular. Esta nueva actividad será la inauguración de la edición, que se complementará, el mismo fin de semana, con la celebración del #InstaVívid. El encuentro de instagramers que tendrá lugar el domingo en la bodega Brugarol de Palamós, obra del estudio de arquitectos RCR de Olot, que acaban de ganar el Premio Pritzker, considerado el Nobel de la arquitectura.
Una de las novedades más destacadas de este año es la programación de catas en espacios singulares, un valor añadido al territorio del Empordà. Entre otros, se podrán degustar los vinos ampurdaneses en el Monestir de Sant Pere de Rodes por la tarde, en el Castell de Requesens, en la Torre de Can Mario del Museu del Suro de Palafrugell o la Casa de l’Abat de Llançà. En todas las actividades, la cata incluye la visita el edificio o a las instalaciones donde se celebra. Del cartel también hay que destacar la inclusión, por primera vez, de paquetes que combinan ofertas de alojamiento o restauración con actividades enoturísticas, como la propuestas de las históricas cooperativas de Espolla, Garriguella y Empordàlia, que proponen visitar las tres bodegas en una mista jornada con comida y merienda incluidos, o los paquetes que combinan alojamiento, restauración, spa y visita a la bodega.